Consejos de consumo consciente para adoptar en tu rutina

Hablar de consumo consciente cobra cada vez más importancia a medida que aparecen las consecuencias de los impactos sobre el medio ambiente.

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Y no es ningún secreto que el principal responsable de estos impactos es la necesidad humana de consumo, que se ha vuelto cada vez mayor gracias al “bombardeo” de información del sector publicitario.

Teniendo esto en cuenta, en el material de hoy discutiremos algunas ideas para promover un consumo con menores impactos, que ayude al planeta y a tu bolsillo. ¡Verificar!

Consumo consciente: importante para tu bolsillo y el planeta

¿Alguna vez te has parado a pensar en cómo los humanos somos los únicos animales del planeta que utilizan los recursos naturales más allá de su subsistencia?

Cada día nos vemos afectados por anuncios y estrategias de marketing cuyo único objetivo es convencernos de que necesitamos consumir.

Y, por supuesto, estas estrategias tienen una explicación económica, pero, si nos fijamos sólo en el punto de vista del planeta, ciertamente es necesario buscar formas de no caer en ese consumo exagerado.

Pero, ¿sabías que el consumo ilimitado también puede suponer un grave perjuicio para tu propia vida?

Esto se debe a que, para ser verdaderamente felices y realizados, necesitamos equilibrio, y el consumo excesivo genera pérdidas en muchos ámbitos, como por ejemplo:

  • Financiero: gastas en lo que no necesitas y como resultado pierdes dinero;
  • Emocional: cada vez es más difícil resistir las tentaciones de los medios de comunicación, lo que hace perder el control emocional;
  • Desequilibrio de la conciencia: Con el tiempo, te pierdes en tu consumo, de modo que todo lo que te rodea deja de tener sentido.

Por eso, invertir en un consumo consciente es crucial para que puedas gestionar tu vida de forma equilibrada, y también ayudar a preservar la naturaleza.

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5 consejos de consumo consciente para incluir en tu rutina

A estas alturas ya sabes que el consumo consciente es una cuestión colectiva, pero sin duda influye mucho en tu vida personal.

Por eso, ahora veremos 5 consejos sencillos pero muy eficaces para empezar a practicar el consumo consciente en tu vida diaria.

1. Prefiere productos recargables

La curiosidad por probar cosas nuevas es uno de los principales factores que nos lleva a consumir en exceso.

Como resultado, antes de que nos quedemos sin champú, ya estamos eligiendo uno de otra marca en el estante.

Además de la acumulación en sí, esta práctica genera una serie de impactos, ya que incentiva a las empresas a producir cada vez más variedades, sin mencionar la cantidad de paquetes.

Por lo tanto, optar por productos recargables te ayudará a ser siempre fiel al producto que te gusta, evitando el incentivo de producir nuevos modelos sólo para llenar los estantes.

Además, los envases recargables suelen tener menos plástico o incluso ser biodegradables, lo que ayuda mucho.

Esta es una práctica sencilla pero excelente para todo aquel que quiera iniciarse en este ámbito del consumo consciente.

2. Cuidado con la influencia de las redes sociales para lograr un consumo consciente

Desde que la profesión de influencer se volvió algo habitual, las redes sociales se han convertido en un bombardeo de promociones, ofertas y productos que cambian la vida.

Con esto nos animamos a consumir cada vez más, ya que las promesas suelen ser milagrosas e inmediatas, en otras palabras: ¡es necesario consumir en ese momento!

Por tanto, ten cuidado con este tipo de influencias, y recuerda que promocionar ese producto es trabajo de la persona, y de ahí su dedicación a convencerte.

No pasará nada si esperas a comprar en otro momento, o incluso decides no consumirlo.

No hay problema en seguir una recomendación en las redes, pero evalúa si tiene sentido en tu vida, implementar un consumo consciente.

3. Conozca el método de producción de sus artículos de consumo

A veces creemos que el consumo consciente consiste básicamente en evitar recoger el producto del lineal.

Pero a veces la verdadera conciencia surge de saber cómo se produjo un artículo en particular.

Tenemos desodorantes que se producen con pruebas en animales, mientras que otros no, y, si necesita comprar este artículo de todos modos, causará menos impacto al optar por el que no está probado.

Esto también se aplica a artículos que consumen mucha agua en su producción, o incluso que utilizan materias primas escasas que podrían ser reemplazadas.

Por eso, evalúa el proceso de producción de tus artículos para poder elegir aquellos que menos problemas generen al planeta.

4. Si es posible, compre a productores independientes.

Los productos autónomos o artesanales suelen ser la mejor alternativa para quienes priorizan el consumo consciente.

Esto se debe a que, como ya hemos comentado, la producción a gran escala es un problema real para el planeta, ya que los insumos utilizados y los residuos que se generan son absurdos.

Al comprar a un pequeño productor se evita esta producción a gran escala, además de contribuir a la formación de ingresos individuales.

Verás que los productos artesanales tienen aún más calidad y valor que los que se pueden encontrar en cualquier lugar y se producen sin ningún cuidado.

5. ¡Comprométete contigo mismo!

Finalmente, hablar de consumo consciente sólo tendrá sentido cuando realmente lo conviertas en un compromiso contigo mismo.

Recuerda que reducir el consumo te ayudará a ver las cosas desde otra perspectiva, y disfrutar de lo que realmente tiene valor en la vida.

Por eso, sé consciente de qué valores son importantes para ti y aplícalos en tus hábitos de consumo, para encontrar el equilibrio y la felicidad.

Al final, adoptar un consumo consciente no es un proceso difícil, ¡pero ciertamente requiere inmersión y responsabilidad social y personal!

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